¿Planeas una escapada con tu perro? Cada vez más personas se animan a descubrir el mundo con sus mascotas. Y no es para menos: viajar con un perro puede ser una de las experiencias más enriquecedoras, tanto para ti como para él. Eso sí, requiere algo de planificación. Elegir el lugar adecuado es fundamental, sobre todo si consideras aspectos como su tamaño, edad, estado de salud, o incluso si puede o no viajar en avión. Por eso hemos preparado esta guía con los mejores destinos para viajar con perros, tanto dentro como fuera de España.
Aquí encontrarás desde escapadas rurales para perros mayores hasta rutas urbanas para los más sociables y activos. Además, al final del artículo te dejamos un consejo clave sobre el seguro de viaje para mascotas, algo esencial para tu tranquilidad.
Viajar con tu perro no es solo una decisión logística o afectiva: tiene beneficios emocionales, sociales y físicos tanto para ti como para él. Incorporar a tu compañero peludo en tus aventuras puede transformar completamente la experiencia de viaje.
Estudios demuestran que la presencia de un animal reduce los niveles de cortisol y mejora la oxigenación cerebral. En contextos de viaje —que pueden generar tensión— tener a tu perro contigo te ayuda a mantener la calma, sentirte acompañado y disfrutar más del presente.
Tener a un perro a tu lado te anima a caminar más, descubrir rincones nuevos y salir de tu zona de confort. Desde un bosque frondoso hasta una pequeña plaza en una ciudad extranjera, tu perro te impulsa a recorrer el mundo con otra mirada.
Los perros son excelentes «rompehielos». Muchas veces permiten iniciar conversaciones con locales y otros viajeros. Especialmente en destinos pet-friendly, puede abrirte puertas, recomendaciones e incluso nuevas amistades.
Lejos de la rutina y de los entornos conocidos, tú y tu perro desarrolláis una nueva dinámica de confianza mutua. Viajar juntos afianza la relación y estimula la comprensión no verbal, la empatía y la cooperación.
Los perros que viajan aprenden a manejar nuevos estímulos, a convivir con diferentes entornos y a desarrollar resiliencia. Siempre que viajes con precaución y a su ritmo, el resultado es un perro más equilibrado, atento y feliz.
Saber que tu perro está contigo y no en una residencia o al cuidado de terceros te libera de la preocupación. Puedes centrarte en disfrutar del destino sabiendo que está seguro, bien cuidado… y pasándola tan bien como tú.
Los paisajes españoles ofrecen un sinfín de oportunidades para viajar con perros sin complicaciones. Si tu peludo es mayor, sensible o se agobia con los estímulos urbanos, estos destinos serán un regalo para sus sentidos (y los tuyos):
En primavera, los cerezos en flor lo transforman en un escenario mágico. Hay rutas de senderismo suaves, alojamientos dog-friendly y poco bullicio. Ideal para caminar a su ritmo.
Sus volcanes inactivos y bosques frondosos son una delicia para los paseos tranquilos. Algunos restaurantes aceptan perros en las terrazas y hay alojamientos rurales donde incluso les preparan cama y cuenco.
Un remanso de paz en los Picos de Europa, con ríos frescos, senderos sombreados y escasa densidad de turistas. Muy valorado por quienes viajan con perros mayores o con movilidad reducida.
No todos los perros toleran los viajes en avión, ya sea por salud, ansiedad o restricciones de raza. Pero eso no significa renunciar a la aventura. Aquí van opciones para desplazarte en coche, tren o ferry:
Puedes llegar en ferry desde Marsella o Toulon. Esta isla combina playas, senderos y pueblos tranquilos donde los perros son bienvenidos. La gastronomía local y el ritmo pausado hacen que valga el viaje.
Muchas de sus playas permiten perros fuera de temporada, y los hoteles boutique suelen aceptar mascotas. En invierno o primavera es un destino espectacular, sin el calor sofocante del verano.
Naturaleza sin masificar, alojamientos pet-friendly, y muchas rutas en altitud moderada. Ideal si tu perro sufre con el calor.
¿Cuál es el mejor lugar para viajar con un perro a nivel internacional? Dependerá de muchos factores, pero estos destinos se repiten entre los favoritos de la comunidad pet-friendly global:
Munich, los Alpes bávaros y los pueblos como Garmisch-Partenkirchen están llenos de zonas verdes, restaurantes con agua y premios para perros, y transportes públicos donde son bienvenidos (con bozal o transportín, según el caso).
Ideal para senderismo con perros. Hay rutas señalizadas para caminatas de distinta dificultad, e incluso hoteles de montaña que ofrecen actividades específicas para humanos y perros.
Ámsterdam y otras ciudades permiten el acceso a parques, transporte, terrazas e incluso museos (algunos admiten perros pequeños). Además, el civismo y respeto por los animales es ejemplar.
Considerada una de las ciudades más pet-friendly del mundo, cuenta con más de 30 parques caninos, cafés para perros y hoteles donde tu mascota es tratada como un huésped más.
A diferencia de muchos parques nacionales, Acadia permite el acceso de perros en la mayoría de sus senderos. Bosques, lagos y vistas al mar lo convierten en un lugar memorable.
Con clima cálido, restaurantes pet-friendly y acceso a zonas naturales como Barton Creek Greenbelt, es una ciudad ideal para perros activos y sociables.
Aunque algunos países de la región aún avanzan en materia pet-friendly, hay destinos donde los perros pueden disfrutar casi tanto como tú:
Entre montañas y lagos, muchas cabañas rurales aceptan mascotas. Además, las temperaturas son agradables y la gastronomía de montaña (ideal para humanos) también suele incluir premios para perros.
Ciudades abiertas al mar, con buena oferta de alojamientos pet-friendly, playas donde los perros son bienvenidos en temporada baja y espacios culturales que no excluyen a los peludos.
Los parques como Chapultepec o Parque México están llenos de perros, y muchos cafés y restaurantes se adaptan para recibirlos. Incluso algunos museos permiten el ingreso de perros pequeños.
Si tienes espíritu nómada (y tu perro también), hay países donde puedes quedarte semanas o meses sin complicaciones:
Desde Vancouver hasta Quebec, encontrarás rutas naturales espectaculares, buena infraestructura y normas claras para viajar con mascotas. Eso sí, hay que cumplir ciertos requisitos sanitarios.
Con paisajes de película, playas vacías y rutas de trekking accesibles, es un destino de ensueño. Aunque el viaje es largo y los trámites exigentes, quienes lo logran aseguran que vale cada esfuerzo.
Además de su riqueza cultural y gastronómica, muchas ciudades italianas como Bolonia, Florencia o Milán están repletas de parques, plazas y hoteles pet-friendly. Es un país donde los perros forman parte de la vida cotidiana.
No lo olvides: viajar con tu perro implica también garantizar su salud y seguridad. Una buena manera de hacerlo es contratando un seguro de viaje para mascotas que cubra imprevistos como enfermedades, accidentes o pérdidas.
Este tipo de cobertura también puede incluir responsabilidad civil, gastos veterinarios e incluso repatriación en caso necesario.
Evita vuelos largos o climas extremos. Opta por alojamientos tranquilos, con acceso a zonas verdes y sin muchas escaleras.
Evita el avión en bodega. Mejor tren, ferry o coche. Busca destinos sin cambios de presión ni calor excesivo.
Destinos de montaña, playas con espacio para correr, y ciudades con parques serán ideales. Europa central o EE. UU. pueden ofrecerle una experiencia inolvidable.
Busca campings que acepten mascotas, y consulta con antelación las normas locales. Muchos destinos naturales en Francia, España o Alemania tienen zonas adaptadas.
